Por: Juan Re Crivello
retratodelinfierno.typepad.com
“El 58% de la población española percibe un salario mensual de 1000 Euros”, según datos del INE.
Millones de mileuristas (y seiscientos euristas) se dirigen a sus centros de trabajos en una metáfora de colmena gigante que se desplaza cercana al núcleo del capitalismo europeo animado por crecimientos de su PIB del 3% anual y del 9% en los ingresos fiscales del Estado. ¿Dónde nos encontramos?. La pregunta mantiene en vilo a multitud de economistas que miran arriba o debajo de la alfombra en busca de la futura crisis de El Dorado español. Y por treceavo año consecutivo la fiebre se mantiene. Esta mañana haciendo cola en una modélica caixa catalana escuchaba el dialogo siguiente: _”A cuarenta años, el préstamo –hipotecario- te queda por 825 Euros mes”.
La clienta de 23 años acompañada por su madre asentía como higiénica respuesta a los dictados del mercado. Este autor parecía entrever la sombra del Tripartito y el tandem Montilla and boys que daba medida de los últimos cuatro años de su gobierno (solo se han construido 4.000 viviendas para jóvenes). _”Debo decir, -añadía el director de la oficina, que para reducir tan solo 100 euros la cuota mensual no te aconsejo aumentar tu préstamo en diez años mas.
En los últimos 10 años se han construido 5 millones de viviendas en este país y la fiebre constructora ha generado unas ganancias que han alimentado a dichas empresas, a los ayuntamientos y al estado central vía impuestos que multitud de mileuristas han sufragado con esfuerzo y tesón. Si Ud antes se retrasaba en tres cuotas hipotecarias le llamaban por teléfono, pero algo ha cambiado, ahora si Ud deja pendiente tan solo medio mes, le llaman una legión de abogados para recordarle sus obligaciones. ¿Pero como hemos llegado a esta situación?
La mancha de aceite del efecto Zara se extiende por la economía española. Me explicare, esta empresa se caracteriza por dibujar un nuevo modelo de gestión. Es la empresa en red. Desaparecen las diferencias entre el industrial y el distribuidor. El producto surge en la venta que transfiere las necesidades a los centros de producción, que mediante una gestión informatizada vuelve a situar la mercancía en el punto de venta en tan solo 24 horas. En cascada los diferentes sectores económicos de este país han caído bajo el hechizo Zara. ¿Ponemos ejemplos?. En Mercadona miles de empleado/as con contrato fijo sitúan en las estanterías un precio y calidad excelente a ritmo de salsa –y en menor medida Dia. En la encantadora ciudad de Sitges, los funcionarios no sobrepasan los 1000 Euros de salario y… el Ayuntamiento ha transferido las contratas de limpieza, basuras, jardinería, etc a las grandes constructoras que utilizan contratos basura y salarios de 600/800 Euros, produciéndose una degradación de la orgullosa clase de funcionarios al ver como sus posibilidades merman.
Para el lector desprevenido es mi deber recordarle que los autores del modelo de contratas, fueron hace años, el tandem Maragall/Montilla, pero que copian todos los Ayuntamientos. Pero podríamos citar hasta el infinitivo ejemplos de empresa en red. ¿Desea Ud. añadirlo a su cesta de la compra?. Citemos algunos, La Caixa –gigante financiero catalán que ha remodelado sus oficinas adaptando sus ventas a la gestión personalizada e internet –y a salarios de todo a mil. O las grandes constructoras (no confundir con los promotores) que han diversificado sus empresas a medioambiente, seguridad, gestión de aeropuertos, de autopistas de peaje, de sistemas informáticos y… electricidad.
Llegados a este punto alguien se preguntara: ¿Qué esta ocurriendo en el corazón de este mundo mileurista? De todo un poco amigos. De todo un poco.
En Barcelona 7000 (Si con mil) protestan en la calle la semana pasada por la carestía de la vivienda y forman el primer movimiento organizado por una “vivienda digna”(1). La creación de 500.000 puestos de trabajo anuales –un ritmo para cardiacos- acalla estas protestas. Otro factor que interviene es la reducción de los precios de los productos de consumo (en 1 año un MP3 de 500 K ha bajado de 120 a 25 Euros, un portátil en dos años ha pasado de 1200 a 599 Euros, un a televisión de 32 pulgadas de 2500 a 700 Euros). La lista de reducción de precios es extensa en los productos de consumo duradero, lo que aumenta esta percepción de efecto riqueza(2).
Cabe agregar, que el modelo de empresa en red ya esta el tercer salto (el primero fue especializar y unir industria con distribución), el segundo la diversificación. Este último es ampliar la red en el mercado mundial. Podría de nuevo dar multitud de ejemplos, pero me ceñiré a dos muy poco conocidos. En Brasil Elecnor y Cobra han ganado la licitación para la gestión del 75% de 2.26 millones de líneas de transmisión de electricidad. Además de construir líneas de transporte, el director de exportación Ricardo Martín manifiesta a El País que estan dispuestos a ”la construcción de plantas generadoras y otros proyectos que abarquen ferrocarriles y muchos negocios mas”(3). En una palabra, su propuesta es transmitir electricidad, pero también distribuirla y generarla multiplicando el efecto Zara.
¿Fenómeno global?. El mileurismo esta aquí para quedarse y además es parte del crecimiento global de la economía española (4). Alguno notara en falta un análisis del papel del gobierno de Rodríguez Zapatero…
Harto de ver al pez.
la trágala del sueño aumenta.
Debajo del agua late el estallido (*)
(1)Este “Movimiento contra la precariedad laboral y por una vivienda digna” comenzó en mayo a partir de un e-mail. La respuesta a la convocatoria “nos hizo ver que éramos demasiados en la misma situación y que si una convocatoria anónima había conseguido reunir a miles de personas, el movimiento tenía que organizarse” declaraciones del mileurista Bernat Feliu, licenciado en Políticas. El País 24 de diciembre de 2006.
(2)Según la ultima encuesta del INE, los ingresos medios de los hogares españoles crecieron un 4% hasta rondar los 8.000 Euros, pero más de un 20% de las mujeres y un 18% de los hombres no llegó a ingresar el 60% de esa cifra.
(3)El País Empresas 24 de diciembre de 2006. (4)19.293 “irregulares” han sido trasladados desde las Islas Canarias a la Península, entre el 1 de enero hasta el 16 de octubre de 2006. Y dejados en libertad –agrega este autor. El Mundo, 27 de diciembre de 2006
(*)Poesía maldita. Juan re-Crivello
Publicación Original: http://retratodelinfierno.typepad.com/retratodelinfierno/2006/12/la_generacin_mi.html
sábado, diciembre 30, 2006
viernes, diciembre 22, 2006
Entrevista con el presidente de la República de Eslovenia, Dr. Janez Drnovsek
Revista: SHARE INTERNACIONAL
Ejemplar: Julio/Agosto 2006
Título: Política en la Nueva Era
Autor: Entrevista con con el presidente de la República de Eslovenia, Dr. Janez Drnovsek por Saso Segula Presenc
El siguiente pequeño extracto de una entrevista con el Presidente de Eslovenia, el Dr. Janez Drnovsek, le revela como un hombre de visión inusual. Su compromiso para el bien común impregna todo lo que dice.
Política en la Nueva Era
Una entrevista con el presidente de la República de Eslovenia, Dr. Janez Drnovsek por Saso Segula Presenc
El Dr. Janez Drnovsek, presidente de la República de Eslovenia, fue antiguamente primer ministro de Eslovenia durante 10 años, y desde mayo de 1989 hasta mayo de 1990 jefe de la presidencia de la antigua Yugoslavia. En septiembre de 1989, él presidió la 9ª Cumbre de Países No Alineados en Belgrado y fue el negociador jefe en las conversaciones por la autonomía de Eslovenia. Él también es economista, analista político y promotor del consenso político. Ha recibido muchos premios internacionales por sus logros políticos, económicos y humanitarios.
A comienzos del 2006 él comenzó la campaña humanitaria y política Movimiento por la Justicia y el Desarrollo para intentar resolver la crisis en la provincia sudanesa de Darfur. Este año ya ha viajado a Francia, EEUU, Bolivia, Rumania, Qatar, Sri Lanka, España, Portugal, Israel, Palestina y Chipre. Saso Segula Prosenc le entrevistó para Share International.
Share International: Hace varios meses usted cambió su actitud, casi de la noche a la mañana, en su papel como presidente de estado. Usted ha estado muy activo en su involucración en esfuerzos por la paz y la justicia en el mundo. Los medios de comunicación y el público en general notaron su compromiso sincero. ¿Qué causó este cambio?
Dr. Janez Drnovsek: ¿Importa lo que lo causó? Puedo responder de esta manera: en cierto punto uno alcanza un nivel de conciencia que luego lleva a que uno abandone los antiguos patrones más usuales, que podrían ser más habituales en política. Pero entonces descubres que eso no es suficiente, que es necesario realmente comenzar a resolver los muchos problemas de la humanidad y que la política convencional con sus enfoques habituales no los soluciona, o, al menos, no lo suficiente. Se debe hacer algo más. Fue una realización y una conciencia despierta de este hecho lo que originó este cambio.
SI: Podemos ver que usted ya no es un político convencional. Usted ha estado animando y conectando a personas de buena voluntad, apoyando sus esfuerzos, actuando para hacer conscientes a las personas. Recientemente ha fundado el Movimiento por la Justicia y el Desarrollo. ¿Qué significa esto para Eslovenia y el mundo?
JD: Es esencial elevar la conciencia. El mundo está desequilibrado. Existen muchos problemas, desde el tema de la pobreza hasta el hecho que muchas personas aún mueren de hambre como también la destrucción de la Tierra y los cambios climáticos. Debemos ser conscientes que estos desequilibrios son enormes y que están aumentando.
A veces, nosotros, los humanos, sentimos que existe alguien que al final se ocupará de todo para que vaya en la dirección correcta. Pienso que, como los pasajeros de un autobús que de pronto descubren que no hay nadie al volante, tendremos que hacer algo nosotros mismos para cambiar la dirección del desarrollo humano y la forma en que actuamos. Y eso es un asunto de conciencia, que nos hagamos conscientes de estos problemas y del hecho que nosotros mismos tendremos también que hacer algo, cada uno de nosotros, sea en nuestro hogar, en el trabajo, cada uno en su propio entorno puede actuar. La única forma de cambiar algo en el mundo es elevar el nivel de conciencia.
Los intentos en el pasado, diversas revoluciones, fracasaron en su mayoría debido a que utilizaron la violencia, que es una mala base. No es posible construir algo bueno sobre algo malo. Sin embargo, si cambiamos la conciencia y cada vez más personas son conscientes de la necesidad de cambios, entonces será posible hacer algo sobre esa base.
SI: A comienzos de este año usted empezó una campaña humanitaria y diplomática con la cual deseaba animar a los gobiernos y diferentes organizaciones en el mundo para resolver la crisis en la provincia sudanesa de Darfur. ¿Por favor describa la situación en Darfur y su visión de cómo resolver el problema?
JD: Darfur es una mala situación típica, una catástrofe humanitaria que algunos consideran como un genocidio. Durante tres años, la comunidad internacional ha estado intentando, sin éxito, resolver el problema. Yo, también, intenté ayudar a resolver el problema de Darfur, si se me permite decirlo, en un momento en que parecía que el mundo se había acostumbrado a esta crisis y que se había convertido en un hecho aceptado, ‘así que no necesitamos seguir preocupándonos de él’. Parecía necesario volver a despertar la conciencia de las personas de que algo muy grave estaba sucediendo allí y que debía hacerse algo más.
Antes de la crisis de Darfur, hubo otras situaciones en donde la comunidad internacional se retrasó: Ruanda, la antigua Yugoslavia, Bosnia Herzegovina, donde el genocidio pudo haberse evitado con una acción internacional más decidida y siendo conscientes en el momento correcto de que algo debía hacerse para evitarlo. Pero la comunidad internacional no supo cómo hacerlo.
Después de Ruanda, después de Bosnia Herzegovina, nosotros, los políticos internacionales dijimos: “No debe haber nunca más una Ruanda, nunca más una Bosnia Herzegovina”. En la Cumbre de Naciones Unidas del pasado septiembre [2005], acordamos que la ONU debería intervenir en casos en los cuales los gobiernos nacionales no eran capaces de, o no se responsabilizaban de, asegurar la supervivencia de su pueblo. La comunidad internacional se comprometió a intervenir en tales situaciones, no respetar la soberanía del estado si esa soberanía significaba que el pueblo moría allí o que el gobierno nacional no deseaba o era incapaz de protegerles. En tales casos, la comunidad internacional está obligada a actuar. Este acuerdo fue alcanzado en septiembre y en todos los meses desde entonces nada ha sucedido en Darfur.
La situación empeoraba, así que llamé la atención sobre Darfur con una campaña humanitaria organizada en Eslovenia. También parecía importante para Eslovenia: mientras que ayudamos a personas en Darfur también estamos elevando la conciencia despierta del pueblo esloveno. Estamos aprendiendo de este caso y nos recuerda que estamos interconectados, que las personas allí sufren ahora, y en otro momento podríamos ser nosotros los que necesitásemos ayuda, y que ahora debemos ayudar. Comencé una campaña política para centrar la atención de la comunidad internacional y de los medios de comunicación en encontrar una solución política para resolver la crisis.
SI: A comienzos de marzo [2006] usted visitó Oriente Medio, donde habló con líderes políticos israelíes y con el presidente palestino Mahmoud Abbas. ¿Cuál fue el propósito de esa visita y cómo respondieron los líderes israelíes y palestinos a sus palabras?
JD: Sí, visité Israel por una invitación suya en un momento bastante específico, justo después de que Hamas ganara la elecciones en Palestina, y cuando Israel se encontraba en una situación especial debido a la convocatoria de elecciones por la condición del primer ministro Sharon. Era un momento de considerable incertidumbre. Fue interesante intercambiar puntos de vista con líderes políticos israelíes y palestinos. Ésta es una de esas situaciones que se ha alargado demasiado y constantemente genera un ciclo de violencia y odio. Pero ha llegado realmente el momento de que encuentren una solución. Les dije tanto a israelíes como a palestinos que merecían paz y estabilidad, que debían encontrar una forma de salir de ese ciclo.
Así que mi enfoque no fue condenar a Hamas por adelantado sino más bien que debía darse a Hamas una oportunidad. Por primera vez Hamas está en una posición de responsabilidad. Al elegir a Hamas, el pueblo palestino puso mucha responsabilidad en Hamas y el pueblo palestino desea la paz. Ellos no desean una escalada de violencia, estoy seguro. Si los líderes de Hamas son personas responsables y serias, deberán acatar el deseo del pueblo palestino.
A veces, la paz puede alcanzarse con partes radicales más pronto y con más estabilidad que con partes más moderadas. Mi mensaje tanto a los israelíes como a los palestinos fue que debía darse una oportunidad a Hamas en esta situación y que no debían saltar a conclusiones demasiado rápido ni caer de nuevo en el ciclo de violencia con demasiada rapidez. El ciclo debía detenerse en alguna parte. Alguien debía dar ese paso. Y si algo positivo no salía de esta situación ahora, entonces me temo que Israel y Palestina volverán a estar condenados a años de violencia, odio, incertidumbre. Por eso algo debe hacerse ahora, aquí, y ellos no deben decir con demasiada prontitud: “Nada puede hacerse en esta situación y con estas personas”.
SI: El mundo ha empequeñecido debido a la tecnología de la información y los medios de comunicación, y los pobres se enfrentan directamente con la brecha entre ellos y la minoría de naciones ricas que tienen demasiado y prácticamente todos los recursos naturales. ¿Puede durar tal sistema?
JD: No, pienso que no puede durar. Esta situación es intolerable. Es vergonzoso. La mayoría de las personas viven en la pobreza, y una pequeña minoría dispone de una riqueza enorme. Esto es inmoral, poco ético y no puede perdurar a largo plazo. Tarde o temprano devolverá el golpe de alguna forma y también afectará a aquellos que tienen mucho ahora. Si la mayoría de personas en el mundo piensan que este mundo es injusto, que también la distribución de la riqueza es extremadamente injusta, entonces tarde o temprano algo tienen que suceder. Esta mayoría sencillamente no aceptará la situación silenciosamente. Cuanto menos, esta situación está creando una atmósfera que alienta el terrorismo. En un entorno en donde las personas están convencidas de que el mundo es injusto, existe, por supuesto, mucha más base para el terrorismo y más personas dispuestas a intervenir en él.
El mundo moderno tiene a su disposición los medios de destrucción masiva. Si los terroristas consiguen esos medios, tarde o temprano podría haber una catástrofe para todo el mundo de la cual nadie podrá aislarse. Los ricos piensan ahora que pueden aislarse del resto del mundo y asegurar su seguridad. No pueden. Nadie puede.
El mundo tendrá que ordenarse de forma diferente y me refiero a través de la conciencia despierta, no la revolución. En el pasado, los problemas se solucionaban con revoluciones que cambiaban el sistema con violencia y redistribuía la riqueza. Resultó ser que esto no estaba bien. Sin embargo, al elevarse su nivel de conciencia, cada vez más personas serán conscientes de que esta situación es insoportable y aquellos que tienen mucho al final comprenderán este hecho.
De hecho se hará imposible contemplar a millones de personas morir mientras alguien tiene miles de millones de dólares y no hace nada para cambiar la situación. Los países más grandes, incluyendo el país más poderoso del mundo, tienen que hacer mucho más para ayudar. Si el país más fuerte del mundo destina todos los fondos que gasta en armamento en un año para resolver la pobreza, aumentaría inmensamente su reputación en el mundo. Ganaría crédito moral y su popularidad sería mucho mayor que ahora cuando gasta dinero en armamento y defensa. Esto, también, es una cuestión de conciencia despierta en los políticos y el pueblo.
Ejemplar: Julio/Agosto 2006
Título: Política en la Nueva Era
Autor: Entrevista con con el presidente de la República de Eslovenia, Dr. Janez Drnovsek por Saso Segula Presenc
El siguiente pequeño extracto de una entrevista con el Presidente de Eslovenia, el Dr. Janez Drnovsek, le revela como un hombre de visión inusual. Su compromiso para el bien común impregna todo lo que dice.
Política en la Nueva Era
Una entrevista con el presidente de la República de Eslovenia, Dr. Janez Drnovsek por Saso Segula Presenc
El Dr. Janez Drnovsek, presidente de la República de Eslovenia, fue antiguamente primer ministro de Eslovenia durante 10 años, y desde mayo de 1989 hasta mayo de 1990 jefe de la presidencia de la antigua Yugoslavia. En septiembre de 1989, él presidió la 9ª Cumbre de Países No Alineados en Belgrado y fue el negociador jefe en las conversaciones por la autonomía de Eslovenia. Él también es economista, analista político y promotor del consenso político. Ha recibido muchos premios internacionales por sus logros políticos, económicos y humanitarios.
A comienzos del 2006 él comenzó la campaña humanitaria y política Movimiento por la Justicia y el Desarrollo para intentar resolver la crisis en la provincia sudanesa de Darfur. Este año ya ha viajado a Francia, EEUU, Bolivia, Rumania, Qatar, Sri Lanka, España, Portugal, Israel, Palestina y Chipre. Saso Segula Prosenc le entrevistó para Share International.
Share International: Hace varios meses usted cambió su actitud, casi de la noche a la mañana, en su papel como presidente de estado. Usted ha estado muy activo en su involucración en esfuerzos por la paz y la justicia en el mundo. Los medios de comunicación y el público en general notaron su compromiso sincero. ¿Qué causó este cambio?
Dr. Janez Drnovsek: ¿Importa lo que lo causó? Puedo responder de esta manera: en cierto punto uno alcanza un nivel de conciencia que luego lleva a que uno abandone los antiguos patrones más usuales, que podrían ser más habituales en política. Pero entonces descubres que eso no es suficiente, que es necesario realmente comenzar a resolver los muchos problemas de la humanidad y que la política convencional con sus enfoques habituales no los soluciona, o, al menos, no lo suficiente. Se debe hacer algo más. Fue una realización y una conciencia despierta de este hecho lo que originó este cambio.
SI: Podemos ver que usted ya no es un político convencional. Usted ha estado animando y conectando a personas de buena voluntad, apoyando sus esfuerzos, actuando para hacer conscientes a las personas. Recientemente ha fundado el Movimiento por la Justicia y el Desarrollo. ¿Qué significa esto para Eslovenia y el mundo?
JD: Es esencial elevar la conciencia. El mundo está desequilibrado. Existen muchos problemas, desde el tema de la pobreza hasta el hecho que muchas personas aún mueren de hambre como también la destrucción de la Tierra y los cambios climáticos. Debemos ser conscientes que estos desequilibrios son enormes y que están aumentando.
A veces, nosotros, los humanos, sentimos que existe alguien que al final se ocupará de todo para que vaya en la dirección correcta. Pienso que, como los pasajeros de un autobús que de pronto descubren que no hay nadie al volante, tendremos que hacer algo nosotros mismos para cambiar la dirección del desarrollo humano y la forma en que actuamos. Y eso es un asunto de conciencia, que nos hagamos conscientes de estos problemas y del hecho que nosotros mismos tendremos también que hacer algo, cada uno de nosotros, sea en nuestro hogar, en el trabajo, cada uno en su propio entorno puede actuar. La única forma de cambiar algo en el mundo es elevar el nivel de conciencia.
Los intentos en el pasado, diversas revoluciones, fracasaron en su mayoría debido a que utilizaron la violencia, que es una mala base. No es posible construir algo bueno sobre algo malo. Sin embargo, si cambiamos la conciencia y cada vez más personas son conscientes de la necesidad de cambios, entonces será posible hacer algo sobre esa base.
SI: A comienzos de este año usted empezó una campaña humanitaria y diplomática con la cual deseaba animar a los gobiernos y diferentes organizaciones en el mundo para resolver la crisis en la provincia sudanesa de Darfur. ¿Por favor describa la situación en Darfur y su visión de cómo resolver el problema?
JD: Darfur es una mala situación típica, una catástrofe humanitaria que algunos consideran como un genocidio. Durante tres años, la comunidad internacional ha estado intentando, sin éxito, resolver el problema. Yo, también, intenté ayudar a resolver el problema de Darfur, si se me permite decirlo, en un momento en que parecía que el mundo se había acostumbrado a esta crisis y que se había convertido en un hecho aceptado, ‘así que no necesitamos seguir preocupándonos de él’. Parecía necesario volver a despertar la conciencia de las personas de que algo muy grave estaba sucediendo allí y que debía hacerse algo más.
Antes de la crisis de Darfur, hubo otras situaciones en donde la comunidad internacional se retrasó: Ruanda, la antigua Yugoslavia, Bosnia Herzegovina, donde el genocidio pudo haberse evitado con una acción internacional más decidida y siendo conscientes en el momento correcto de que algo debía hacerse para evitarlo. Pero la comunidad internacional no supo cómo hacerlo.
Después de Ruanda, después de Bosnia Herzegovina, nosotros, los políticos internacionales dijimos: “No debe haber nunca más una Ruanda, nunca más una Bosnia Herzegovina”. En la Cumbre de Naciones Unidas del pasado septiembre [2005], acordamos que la ONU debería intervenir en casos en los cuales los gobiernos nacionales no eran capaces de, o no se responsabilizaban de, asegurar la supervivencia de su pueblo. La comunidad internacional se comprometió a intervenir en tales situaciones, no respetar la soberanía del estado si esa soberanía significaba que el pueblo moría allí o que el gobierno nacional no deseaba o era incapaz de protegerles. En tales casos, la comunidad internacional está obligada a actuar. Este acuerdo fue alcanzado en septiembre y en todos los meses desde entonces nada ha sucedido en Darfur.
La situación empeoraba, así que llamé la atención sobre Darfur con una campaña humanitaria organizada en Eslovenia. También parecía importante para Eslovenia: mientras que ayudamos a personas en Darfur también estamos elevando la conciencia despierta del pueblo esloveno. Estamos aprendiendo de este caso y nos recuerda que estamos interconectados, que las personas allí sufren ahora, y en otro momento podríamos ser nosotros los que necesitásemos ayuda, y que ahora debemos ayudar. Comencé una campaña política para centrar la atención de la comunidad internacional y de los medios de comunicación en encontrar una solución política para resolver la crisis.
SI: A comienzos de marzo [2006] usted visitó Oriente Medio, donde habló con líderes políticos israelíes y con el presidente palestino Mahmoud Abbas. ¿Cuál fue el propósito de esa visita y cómo respondieron los líderes israelíes y palestinos a sus palabras?
JD: Sí, visité Israel por una invitación suya en un momento bastante específico, justo después de que Hamas ganara la elecciones en Palestina, y cuando Israel se encontraba en una situación especial debido a la convocatoria de elecciones por la condición del primer ministro Sharon. Era un momento de considerable incertidumbre. Fue interesante intercambiar puntos de vista con líderes políticos israelíes y palestinos. Ésta es una de esas situaciones que se ha alargado demasiado y constantemente genera un ciclo de violencia y odio. Pero ha llegado realmente el momento de que encuentren una solución. Les dije tanto a israelíes como a palestinos que merecían paz y estabilidad, que debían encontrar una forma de salir de ese ciclo.
Así que mi enfoque no fue condenar a Hamas por adelantado sino más bien que debía darse a Hamas una oportunidad. Por primera vez Hamas está en una posición de responsabilidad. Al elegir a Hamas, el pueblo palestino puso mucha responsabilidad en Hamas y el pueblo palestino desea la paz. Ellos no desean una escalada de violencia, estoy seguro. Si los líderes de Hamas son personas responsables y serias, deberán acatar el deseo del pueblo palestino.
A veces, la paz puede alcanzarse con partes radicales más pronto y con más estabilidad que con partes más moderadas. Mi mensaje tanto a los israelíes como a los palestinos fue que debía darse una oportunidad a Hamas en esta situación y que no debían saltar a conclusiones demasiado rápido ni caer de nuevo en el ciclo de violencia con demasiada rapidez. El ciclo debía detenerse en alguna parte. Alguien debía dar ese paso. Y si algo positivo no salía de esta situación ahora, entonces me temo que Israel y Palestina volverán a estar condenados a años de violencia, odio, incertidumbre. Por eso algo debe hacerse ahora, aquí, y ellos no deben decir con demasiada prontitud: “Nada puede hacerse en esta situación y con estas personas”.
SI: El mundo ha empequeñecido debido a la tecnología de la información y los medios de comunicación, y los pobres se enfrentan directamente con la brecha entre ellos y la minoría de naciones ricas que tienen demasiado y prácticamente todos los recursos naturales. ¿Puede durar tal sistema?
JD: No, pienso que no puede durar. Esta situación es intolerable. Es vergonzoso. La mayoría de las personas viven en la pobreza, y una pequeña minoría dispone de una riqueza enorme. Esto es inmoral, poco ético y no puede perdurar a largo plazo. Tarde o temprano devolverá el golpe de alguna forma y también afectará a aquellos que tienen mucho ahora. Si la mayoría de personas en el mundo piensan que este mundo es injusto, que también la distribución de la riqueza es extremadamente injusta, entonces tarde o temprano algo tienen que suceder. Esta mayoría sencillamente no aceptará la situación silenciosamente. Cuanto menos, esta situación está creando una atmósfera que alienta el terrorismo. En un entorno en donde las personas están convencidas de que el mundo es injusto, existe, por supuesto, mucha más base para el terrorismo y más personas dispuestas a intervenir en él.
El mundo moderno tiene a su disposición los medios de destrucción masiva. Si los terroristas consiguen esos medios, tarde o temprano podría haber una catástrofe para todo el mundo de la cual nadie podrá aislarse. Los ricos piensan ahora que pueden aislarse del resto del mundo y asegurar su seguridad. No pueden. Nadie puede.
El mundo tendrá que ordenarse de forma diferente y me refiero a través de la conciencia despierta, no la revolución. En el pasado, los problemas se solucionaban con revoluciones que cambiaban el sistema con violencia y redistribuía la riqueza. Resultó ser que esto no estaba bien. Sin embargo, al elevarse su nivel de conciencia, cada vez más personas serán conscientes de que esta situación es insoportable y aquellos que tienen mucho al final comprenderán este hecho.
De hecho se hará imposible contemplar a millones de personas morir mientras alguien tiene miles de millones de dólares y no hace nada para cambiar la situación. Los países más grandes, incluyendo el país más poderoso del mundo, tienen que hacer mucho más para ayudar. Si el país más fuerte del mundo destina todos los fondos que gasta en armamento en un año para resolver la pobreza, aumentaría inmensamente su reputación en el mundo. Ganaría crédito moral y su popularidad sería mucho mayor que ahora cuando gasta dinero en armamento y defensa. Esto, también, es una cuestión de conciencia despierta en los políticos y el pueblo.
martes, diciembre 12, 2006
Peter Sloterdijk; El post-humanismo: sus fuentes teológicas y sus medios técnicos
Dr. Adolfo Vásquez Rocca.
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso - Universidad Complutense de Madrid
Informe de Conferencia1
El post-humanismo: sus fuentes teológicas, sus medios técnicos
Abstract
Entendiendo que no podían dejar de pensarse algunas zonas límites de los actos y pensamientos del hombre, simplemente porque excedían la capacidad crítica del humanismo tradicional -la biotecnología, la cultura de la imagen tecnológica, los nuevos desplazamientos de las multitudes, el paradigma límite de la política fascista, la domesticación del animal-hombre, la guerra medioambiental y el atmoterrorismo, etc...- se proponen nuevos caminos que tienen en la mediación de la técnica su formulación discursiva y sus orígenes en las disidencias que, desde la propia tradición filosófica, reducían la estancia del hombre en el mundo a su expresión leída y escrita.
- La polémica que Jürgen Habermas y Peter Sloterdijk suscitaron en Alemania, en torno al humanismo como modelo de "civilización" del género humano, ha vuelto a poner de actualidad un tema crucial para la estancia del hombre en el mundo.
En el mismo sentido, el arte moderno lleva grabado su proyecto "antihumanista" como la leyenda principal de su emblema. La polémica del arte moderno, sin embargo, no se dirige contra el hombre sino que arremete contra su hechura ideológica. En palabras de Giorgio Agamben, "no es antihumana, sino antihumanista". Los intentos, además, de formular la cultura humanística en torno al eje escritura/lectura frente a un antihumanismo que se expresaría por lo audiovisual y lo tecnológico, han hecho levantarse voces que reclaman el papel de lo oral para un entendimiento primero del mundo. El hablante, el discurso, la lección, la asamblea, la retórica, lo performativo; modos de poner la ponencia oral, el acto hablado, el diálogo abierto, el debate vivido en el centro mismo del quehacer filosófico.
Desde el área de Ética y Política de UNIA arteypensamiento2, se puso en marcha una estancia continuada de reflexión en torno a estos asuntos, que llega ahora a su fin con la presencia de Peter Sloterdijk.
Tras cuatro ciclos de conferencias en los que han intervenido Víctor Gómez Pin, Fernando Savater, Javier Echevarría, Félix Duque, Ángel González García, Massimo Cacciari, Alberto Cordero, Gerhard Vollmer, Francisco J. Ayala, Manuel Barrios, Nicolás Sánchez Durá y Joan Pipó Comorera, el proyecto La deshumanización del mundo (incluido en las dos primeras ediciones de UNIA arteypensamiento) se clausuró el pasado viernes 9 de mayo con la presencia del filósofo alemán Peter Sloterdijk. Creador de una obra polémica y rebelde que ha quebrado las rígidas normas de la filosofía académica actual, Sloterdijk presentó en julio de 1999 un texto titulado Normas para el parque humano que generó (y sigue generando) un acalorado y controvertido debate público (sobre todo por la reacción de Jürgen Habermas y sus seguidores) en torno a la crisis del humanismo como modelo de civilización. Durante su intervención en el Aula del Rectorado de la sede La Cartuja (Sevilla) de la Universidad Internacional de Andalucía, el autor de Crítica de la razón cínica (el libro de filosofía en lengua alemana más vendido desde la II Guerra Mundial) exploró las fuentes teológicas y las mediaciones técnicas sobre las que se configura su polémico proyecto post-humanista.
Con más de 2.500 años de historia, gran parte de la filosofía occidental se ha desarrollado a partir de lo que Sloterdijk considera "una relación perversa entre la arquitectura y el lenguaje que ha empujado el pensamiento hasta el suelo impidiendo su libertad de movimiento". De este modo se han constituido una serie de fundamentalismos filosóficos ("cristianismo, marxismo, existencialismo..., meras variantes del humanismo") en los que la necesidad de mantener unas definiciones sólidas e incontrovertibles ha impedido que se dude de los conceptos que presuponen. Según Sloterdijk la metafísica ha seguido una estrategia igualmente perversa: generar la sensación de un vacío y al mismo tiempo imponer la necesidad de cubrirlo con la emergencia del sujeto.
Frente a esta tendencia al enclaustramiento sobre sí mismo que caracteriza el pensamiento filosófico occidental, Sloterdijk cree que hay que adoptar una nueva perspectiva analítica que incorpore la sabiduría de la vida cotidiana (donde los hombres deben enfrentarse continuamente a la indefinición y a la incertidumbre) para intentar comprender la complejidad y polivalencia del mundo. "No creo, señaló Peter Sloterdijk, en los fundamentos sólidos, porque los discursos flotan en el aire y es allí donde hay que salir a buscarlos". Desde este provocador y poético punto de partida, Sloterdijk insiste en la necesidad de luchar contra los esencialismos y de convocar los sentidos y sensaciones del espacio como experiencia primaria de la vida humana.
Para el autor de Esferas I, Burbujas es necesario revisar los planteamientos que la historia de la filosofía ha dado por supuestos, especialmente los aspectos más destematizados (es decir, aquellos de los que (ya) no se habla porque se consideran intocables o superados). En este sentido, Sloterdijk subrayó la paradoja de que en sus más de dos milenios de historia, la filosofía apenas haya tratado a fondo temas como la vida ("no hay más de 20 frases razonables dedicadas a ella", precisó) o la definición última del hombre. "Como el aire, el agua, respirar o la leche materna, explicó Sloterdijk, hemos concebido la vida como algo fijo y definido, como un crédito original que nos otorgaba Dios o la naturaleza para que nosotros nos limitásemos a no malgastarlo". Otro de esos créditos originales que sólo ha comenzado a repensarse en los tres últimos siglos es el "ser". Para Sloterdijk el filósofo se definiría como aquella persona que parte de un nivel cero de comprensión y prescinde de todos los créditos originales, de todas las ideas pre-establecidas. O como dice Paul Valéry en su introducción al Discurso del método de Descartes: para ser filósofo no hay que comprender. "Porque la filosofía, subrayó Peter Sloterdijk, es una inteligencia en el exilio cuyo punto de partida es no comprender y presuponer nada".
Peter Sloterdijk concibe que la misión de la filosofía es poner en marcha un ejercicio de destrivialización que convierta lo dado en repetido. Por la repetición, el conocer adelanta al ser, hasta el punto de que transformamos una fecha original (una improbabilidad) en un suceso histórico (un hecho). Lo dado, entonces, se convierte en lo hecho. O como dicen los pragmáticos estadounidenses, "lo encontrado se transforma en lo hecho". Desde esta perspectiva, el objetivo de la filosofía consiste en demostrar que todo lo encontrado (o dado), lo pre-establecido, lo que creemos que es natural y no fruto de una mediación, es ante todo una construcción que damos por válida porque se ha repetido como verdad. "Cuando Cristóbal Colón, ejemplificó Peter Sloterdijk, llegó a la isla de Guanahaní (actual Watling en las Bahamas) y vio a sus pobladores originales, dijo (y realmente creyó en lo que dijo) que se había encontrado con indios; pero en realidad había construido a esas personas como indios". Tampoco Heidegger en su celo por presentar ontológicamente puro el punto de partida del hombre como ser-ahí y ser-en-el-mundo, logra comprenderlo desde la conciencia de que es un producto, un efecto de programaciones y adiestramientos.
La experiencia humanista presupone la distinción entre el estado de la vigilia (verdadero y compartido por todos) y el estado del sueño (falso y privado). Pero en el mundo post-humano no está tan clara la frontera entre ambos estados y, por ejemplo, en el ciberespacio, la vigilia se puebla de androides ante los cuales ya no se puede saber a simple vista si son hombres verdaderos o replicantes (cuestionando la singularidad de lo humano). En este punto, Sloterdijk recordó la sugerente metáfora con la que Fitche (cuyo pensamiento conecta el idealismo con el existencialismo) define la vigilia: "una fuerza en la que se ha implantado un ojo". Por ello, si el siglo XX ha sido el siglo de la lengua en la filosofía, Sloterdijk espera que el XXI sea el de la vigilia y que la fenomenología del espíritu (que Hegel concibió como un proyecto de destrivialización del ser) se convierta en una historia de la atención. "Podría formarse así, dice Sloterdijk en Normas para el parque humano, una sociedad de los meditabundos (...), una sociedad de hombres que desplacen del centro al ser humano porque han sido capaces de comprender que ellos sólo existen como vecinos del ser, y no como empecinados dueños de la casa o como mandatarios principales del inmueble en virtud de un contrato irrevocable de alquiler".
Pre-humanismo y post-humananismo
¿Qué es lo que tiene de especial el post-humanismo? ¿Qué es lo que nos altera y nos provoca cuando hablamos de la posibilidad de una civilización post-humana? ¿Por qué se da por "hecho" que el pensamiento tiene que ser humanista? ¿En qué contexto histórico se estableció que hablar de lo humano suponía situar al hombre en el centro? ¿Qué había antes de esas improbabilidades fijadas como "hechos" que ha promovido el humanismo: por ejemplo, concebir al hombre como un animal racional, como "una animalitas aderezada de aditivos espirituales"? ¿Y qué puede haber después?
Peter Sloterdijk junto a Mar Villaespesa y Nicolás Sánchez DuráCon estas preguntas inició Peter Sloterdijk la segunda parte de su intervención en el ciclo de conferencias La deshumanización del mundo donde señaló que el humanismo (cuyo principal objetivo es la domesticación racional del sujeto-hombre y la expansión de su poder sobre todos los objetos) debe entenderse como un periodo del pensamiento occidental que se sitúa entre un pasado pre-humanista y un presente/fututo post-humanista. En este sentido, el autor de Crítica de la razón cínica enlaza la estructura pre-humanista del pensamiento teológico con el proyecto post-humanista ya que representan planteamientos discursivos que, a diferencia del humanismo, no parten de una rígida distinción entre sujetos y objetos ni definen exclusivamente la estancia del hombre en el mundo desde una perspectiva biológica y cultural.
Toda la metafísica clásica es teocéntrica (pone a Dios en el centro) y, por tanto, anti-humanista. Para el pensamiento teocéntrico, el hombre sólo es importante en tanto que recipiente de la perfección, del mismo modo que el sol necesita la luna para poder ejercer su reinado (metáfora muy utilizada durante la Edad Media). "A ningún teólogo clásico, precisó Peter Sloterdijk, se le hubiera ocurrido colocar al ser humano en el centro del mundo, porque para ellos ese espacio estaba atravesado por la obra de una inteligencia trashumana (dios o los dioses), externa, que lo veía y lo comprendía todo". El optimismo teocéntrico de la Edad Media se basaba en la certeza de que se podía hacer una extrapolación entre la inteligencia humana (capaz de manejar los asuntos de la tierra) y la divina (capaz de extenderse hacia el infinito y comprenderlo todo).
Sloterdijk recordó que otra de las fuentes del pensamiento post-humanista se encuentra en una interpretación afectiva del mundo que piensa que las grandes fuerzas (los dioses) se encarnan en otros seres de la naturaleza, incluso en los principales enemigos de la supervivencia de la especie. Frente al humanismo egocéntrico y racional que niega la existencia de un punto externo al hombre desde el que todo se comprende, esta interpretación del mundo es xenolátrica (adoración del otro, del extranjero) y parte de una fascinación hacia lo que nos rodea y de un despojamiento de cualquier singularidad subjetiva. En este sentido se explicaría la tesis antropológica de que el origen de muchas religiones derivaría de los rituales de culto a animales salvajes (símbolo de lo externo que amenaza a la vez que fascina) que practicaban ciertas comunidades primitivas. "Un culto, matizó Peter Sloterdijk, que también permitía el control y regulación de esos seres, incluso la conversión de algunos de ellos en animales domésticos puestos al servicio de los hombres".
En conexión con estas estructuras de pensamiento pre-humanistas, el post-humanismo se constituye como una respuesta filosófica a un mundo donde cada vez es más difícil distinguir entre lo natural y lo artificial (si acaso aún fuera necesario hacer dicha distinción) y en el que el eje escritura/lectura que articulaba la cultura humanista pierde protagonismo ante la emergencia de nuevos medios de expresión y comunicación. Frente al miedo a que las máquinas terminen sustituyendo a los humanos, el post-humanismo recupera la actitud xenolátrica y se plantea la necesidad de desarrollar un pensamiento ecológico (en su sentido más amplio) que tenga en cuenta no sólo el entorno natural sino también el tecnológico (e incorpore, entre otras cosas, los derechos cívicos de las máquinas).
En este sentido, Peter Sloterdijk advirtió que el término máquina es un concepto enfermo del vocabulario europeo, ya que se originó en un contexto ontológico "muy crudo y unilateral" que distinguía de forma categórica entre las entidades con almas (las personas) y las entidades sin almas (las cosas, entre las que se incluirían las máquinas). Con su necesidad de apoyarse en fundamentos sólidos e inamovibles, la historia de la filosofía occidental ha aceptado esta distinción sin cuestionarla y no se ha preocupado por reflexionar sobre las entidades sin alma. Pero es imposible comprender la complejidad y polivalencia de la experiencia contemporánea a partir de criterios dialécticos que enfrenten como elementos excluyentes al hombre con la máquina o a las almas con las cosas. El vertiginoso desarrollo tecnológico que se ha producido en el último siglo deja al humanismo sin respuestas adecuadas ante la aparición de máquinas (entidades sin almas) cada vez más poderosas y parecidas a los hombres (y no sólo por sus envolturas antropomórficas). "El corsario, ejemplificó Peter Sloterdijk, sabía donde acababa su cuerpo y empezaba el gancho; con las nuevas prótesis esa distinción se complica y con el desarrollo bio-tecnológico dejará de tener sentido".
Frente a la histeria anti-tecnológica que piensa que tenemos que desarrollarnos al margen de las máquinas, el autor de En el mismo barco, ensayo sobre hiperpolítica cree que es necesario relacionarse con ellas y asumir que es imposible vivir en un entorno construido y habitado sólo por humanos. A partir del ejemplo de Andy Warhol que, con una actitud pretendidamente burlona y provocadora, aseguró que había decidido mantener un idilio con su aparato de radio, Sloterdijk abogó en la conclusión de su conferencia por una especie de poligamia entre hombre y tecnología, afirmando que "tenemos que casarnos con las máquinas con las que compartimos nuestras vidas". El post-humanismo concibe al hombre (y no sólo al hombre contemporáneo) como un equipo técnico y y cree que las nuevas herramientas tecnológicas pueden promover un pensamiento en comunidad (no sólo humana). Según Peter Sloterdijk hay que prescindir de una interpretación (humanista) del mundo estructurada sobre la dicotomía sujeto-objeto, porque "los hombres necesitan relacionarse entre ellos pero también con las máquinas, los animales, las plantas..., y deben aprender a tener una relación polivalente con el entorno".
Conferencia:
Aula del Rectorado de la Universidad Internacional de Andalucía.
1 Conferencia “El post-humanismo: sus fuentes teológicas, sus medios técnicos” de Peter Sloterdijk en el Aula del Rectorado de la Universidad Internacional de Andalucía, el 9 de mayo de 2003.
2arteypensamiento es un proyecto de la Universidad Internacional de Andalucía UNIA que tiene como objetivo incorporar la institución universitaria a los debates, la producción, la difusión y la consolidación de las creaciones y reflexiones contemporáneas. Debe entenderse no sólo como una forma de completar la oferta académica de la Universidad Internacional de Andalucía, sino sobre todo como una forma de relacionar la universidad con el entorno cultural y social, de manera que se aumente la incidencia que tiene en el tejido social.
arteypensamiento, se articula en torno al concepto de re/pensar, aplicado al campo del arte en su relación con la cultura y sociedad; y como consecuencia de ello, busca re/formular modelos, formatos, modos de presentación y difusión: talleres, laboratorios, seminarios, conferencias, encuentros, proyectos en la red, publicaciones.
Editor: Adolfo Vásquez Rocca | Revista Observaciones Filosóficas © 2005 - 2006 DanoEX
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso - Universidad Complutense de Madrid
Informe de Conferencia1
El post-humanismo: sus fuentes teológicas, sus medios técnicos
Abstract
Entendiendo que no podían dejar de pensarse algunas zonas límites de los actos y pensamientos del hombre, simplemente porque excedían la capacidad crítica del humanismo tradicional -la biotecnología, la cultura de la imagen tecnológica, los nuevos desplazamientos de las multitudes, el paradigma límite de la política fascista, la domesticación del animal-hombre, la guerra medioambiental y el atmoterrorismo, etc...- se proponen nuevos caminos que tienen en la mediación de la técnica su formulación discursiva y sus orígenes en las disidencias que, desde la propia tradición filosófica, reducían la estancia del hombre en el mundo a su expresión leída y escrita.
- La polémica que Jürgen Habermas y Peter Sloterdijk suscitaron en Alemania, en torno al humanismo como modelo de "civilización" del género humano, ha vuelto a poner de actualidad un tema crucial para la estancia del hombre en el mundo.
En el mismo sentido, el arte moderno lleva grabado su proyecto "antihumanista" como la leyenda principal de su emblema. La polémica del arte moderno, sin embargo, no se dirige contra el hombre sino que arremete contra su hechura ideológica. En palabras de Giorgio Agamben, "no es antihumana, sino antihumanista". Los intentos, además, de formular la cultura humanística en torno al eje escritura/lectura frente a un antihumanismo que se expresaría por lo audiovisual y lo tecnológico, han hecho levantarse voces que reclaman el papel de lo oral para un entendimiento primero del mundo. El hablante, el discurso, la lección, la asamblea, la retórica, lo performativo; modos de poner la ponencia oral, el acto hablado, el diálogo abierto, el debate vivido en el centro mismo del quehacer filosófico.
Desde el área de Ética y Política de UNIA arteypensamiento2, se puso en marcha una estancia continuada de reflexión en torno a estos asuntos, que llega ahora a su fin con la presencia de Peter Sloterdijk.
Tras cuatro ciclos de conferencias en los que han intervenido Víctor Gómez Pin, Fernando Savater, Javier Echevarría, Félix Duque, Ángel González García, Massimo Cacciari, Alberto Cordero, Gerhard Vollmer, Francisco J. Ayala, Manuel Barrios, Nicolás Sánchez Durá y Joan Pipó Comorera, el proyecto La deshumanización del mundo (incluido en las dos primeras ediciones de UNIA arteypensamiento) se clausuró el pasado viernes 9 de mayo con la presencia del filósofo alemán Peter Sloterdijk. Creador de una obra polémica y rebelde que ha quebrado las rígidas normas de la filosofía académica actual, Sloterdijk presentó en julio de 1999 un texto titulado Normas para el parque humano que generó (y sigue generando) un acalorado y controvertido debate público (sobre todo por la reacción de Jürgen Habermas y sus seguidores) en torno a la crisis del humanismo como modelo de civilización. Durante su intervención en el Aula del Rectorado de la sede La Cartuja (Sevilla) de la Universidad Internacional de Andalucía, el autor de Crítica de la razón cínica (el libro de filosofía en lengua alemana más vendido desde la II Guerra Mundial) exploró las fuentes teológicas y las mediaciones técnicas sobre las que se configura su polémico proyecto post-humanista.
Con más de 2.500 años de historia, gran parte de la filosofía occidental se ha desarrollado a partir de lo que Sloterdijk considera "una relación perversa entre la arquitectura y el lenguaje que ha empujado el pensamiento hasta el suelo impidiendo su libertad de movimiento". De este modo se han constituido una serie de fundamentalismos filosóficos ("cristianismo, marxismo, existencialismo..., meras variantes del humanismo") en los que la necesidad de mantener unas definiciones sólidas e incontrovertibles ha impedido que se dude de los conceptos que presuponen. Según Sloterdijk la metafísica ha seguido una estrategia igualmente perversa: generar la sensación de un vacío y al mismo tiempo imponer la necesidad de cubrirlo con la emergencia del sujeto.
Frente a esta tendencia al enclaustramiento sobre sí mismo que caracteriza el pensamiento filosófico occidental, Sloterdijk cree que hay que adoptar una nueva perspectiva analítica que incorpore la sabiduría de la vida cotidiana (donde los hombres deben enfrentarse continuamente a la indefinición y a la incertidumbre) para intentar comprender la complejidad y polivalencia del mundo. "No creo, señaló Peter Sloterdijk, en los fundamentos sólidos, porque los discursos flotan en el aire y es allí donde hay que salir a buscarlos". Desde este provocador y poético punto de partida, Sloterdijk insiste en la necesidad de luchar contra los esencialismos y de convocar los sentidos y sensaciones del espacio como experiencia primaria de la vida humana.
Para el autor de Esferas I, Burbujas es necesario revisar los planteamientos que la historia de la filosofía ha dado por supuestos, especialmente los aspectos más destematizados (es decir, aquellos de los que (ya) no se habla porque se consideran intocables o superados). En este sentido, Sloterdijk subrayó la paradoja de que en sus más de dos milenios de historia, la filosofía apenas haya tratado a fondo temas como la vida ("no hay más de 20 frases razonables dedicadas a ella", precisó) o la definición última del hombre. "Como el aire, el agua, respirar o la leche materna, explicó Sloterdijk, hemos concebido la vida como algo fijo y definido, como un crédito original que nos otorgaba Dios o la naturaleza para que nosotros nos limitásemos a no malgastarlo". Otro de esos créditos originales que sólo ha comenzado a repensarse en los tres últimos siglos es el "ser". Para Sloterdijk el filósofo se definiría como aquella persona que parte de un nivel cero de comprensión y prescinde de todos los créditos originales, de todas las ideas pre-establecidas. O como dice Paul Valéry en su introducción al Discurso del método de Descartes: para ser filósofo no hay que comprender. "Porque la filosofía, subrayó Peter Sloterdijk, es una inteligencia en el exilio cuyo punto de partida es no comprender y presuponer nada".
Peter Sloterdijk concibe que la misión de la filosofía es poner en marcha un ejercicio de destrivialización que convierta lo dado en repetido. Por la repetición, el conocer adelanta al ser, hasta el punto de que transformamos una fecha original (una improbabilidad) en un suceso histórico (un hecho). Lo dado, entonces, se convierte en lo hecho. O como dicen los pragmáticos estadounidenses, "lo encontrado se transforma en lo hecho". Desde esta perspectiva, el objetivo de la filosofía consiste en demostrar que todo lo encontrado (o dado), lo pre-establecido, lo que creemos que es natural y no fruto de una mediación, es ante todo una construcción que damos por válida porque se ha repetido como verdad. "Cuando Cristóbal Colón, ejemplificó Peter Sloterdijk, llegó a la isla de Guanahaní (actual Watling en las Bahamas) y vio a sus pobladores originales, dijo (y realmente creyó en lo que dijo) que se había encontrado con indios; pero en realidad había construido a esas personas como indios". Tampoco Heidegger en su celo por presentar ontológicamente puro el punto de partida del hombre como ser-ahí y ser-en-el-mundo, logra comprenderlo desde la conciencia de que es un producto, un efecto de programaciones y adiestramientos.
La experiencia humanista presupone la distinción entre el estado de la vigilia (verdadero y compartido por todos) y el estado del sueño (falso y privado). Pero en el mundo post-humano no está tan clara la frontera entre ambos estados y, por ejemplo, en el ciberespacio, la vigilia se puebla de androides ante los cuales ya no se puede saber a simple vista si son hombres verdaderos o replicantes (cuestionando la singularidad de lo humano). En este punto, Sloterdijk recordó la sugerente metáfora con la que Fitche (cuyo pensamiento conecta el idealismo con el existencialismo) define la vigilia: "una fuerza en la que se ha implantado un ojo". Por ello, si el siglo XX ha sido el siglo de la lengua en la filosofía, Sloterdijk espera que el XXI sea el de la vigilia y que la fenomenología del espíritu (que Hegel concibió como un proyecto de destrivialización del ser) se convierta en una historia de la atención. "Podría formarse así, dice Sloterdijk en Normas para el parque humano, una sociedad de los meditabundos (...), una sociedad de hombres que desplacen del centro al ser humano porque han sido capaces de comprender que ellos sólo existen como vecinos del ser, y no como empecinados dueños de la casa o como mandatarios principales del inmueble en virtud de un contrato irrevocable de alquiler".
Pre-humanismo y post-humananismo
¿Qué es lo que tiene de especial el post-humanismo? ¿Qué es lo que nos altera y nos provoca cuando hablamos de la posibilidad de una civilización post-humana? ¿Por qué se da por "hecho" que el pensamiento tiene que ser humanista? ¿En qué contexto histórico se estableció que hablar de lo humano suponía situar al hombre en el centro? ¿Qué había antes de esas improbabilidades fijadas como "hechos" que ha promovido el humanismo: por ejemplo, concebir al hombre como un animal racional, como "una animalitas aderezada de aditivos espirituales"? ¿Y qué puede haber después?
Peter Sloterdijk junto a Mar Villaespesa y Nicolás Sánchez DuráCon estas preguntas inició Peter Sloterdijk la segunda parte de su intervención en el ciclo de conferencias La deshumanización del mundo donde señaló que el humanismo (cuyo principal objetivo es la domesticación racional del sujeto-hombre y la expansión de su poder sobre todos los objetos) debe entenderse como un periodo del pensamiento occidental que se sitúa entre un pasado pre-humanista y un presente/fututo post-humanista. En este sentido, el autor de Crítica de la razón cínica enlaza la estructura pre-humanista del pensamiento teológico con el proyecto post-humanista ya que representan planteamientos discursivos que, a diferencia del humanismo, no parten de una rígida distinción entre sujetos y objetos ni definen exclusivamente la estancia del hombre en el mundo desde una perspectiva biológica y cultural.
Toda la metafísica clásica es teocéntrica (pone a Dios en el centro) y, por tanto, anti-humanista. Para el pensamiento teocéntrico, el hombre sólo es importante en tanto que recipiente de la perfección, del mismo modo que el sol necesita la luna para poder ejercer su reinado (metáfora muy utilizada durante la Edad Media). "A ningún teólogo clásico, precisó Peter Sloterdijk, se le hubiera ocurrido colocar al ser humano en el centro del mundo, porque para ellos ese espacio estaba atravesado por la obra de una inteligencia trashumana (dios o los dioses), externa, que lo veía y lo comprendía todo". El optimismo teocéntrico de la Edad Media se basaba en la certeza de que se podía hacer una extrapolación entre la inteligencia humana (capaz de manejar los asuntos de la tierra) y la divina (capaz de extenderse hacia el infinito y comprenderlo todo).
Sloterdijk recordó que otra de las fuentes del pensamiento post-humanista se encuentra en una interpretación afectiva del mundo que piensa que las grandes fuerzas (los dioses) se encarnan en otros seres de la naturaleza, incluso en los principales enemigos de la supervivencia de la especie. Frente al humanismo egocéntrico y racional que niega la existencia de un punto externo al hombre desde el que todo se comprende, esta interpretación del mundo es xenolátrica (adoración del otro, del extranjero) y parte de una fascinación hacia lo que nos rodea y de un despojamiento de cualquier singularidad subjetiva. En este sentido se explicaría la tesis antropológica de que el origen de muchas religiones derivaría de los rituales de culto a animales salvajes (símbolo de lo externo que amenaza a la vez que fascina) que practicaban ciertas comunidades primitivas. "Un culto, matizó Peter Sloterdijk, que también permitía el control y regulación de esos seres, incluso la conversión de algunos de ellos en animales domésticos puestos al servicio de los hombres".
En conexión con estas estructuras de pensamiento pre-humanistas, el post-humanismo se constituye como una respuesta filosófica a un mundo donde cada vez es más difícil distinguir entre lo natural y lo artificial (si acaso aún fuera necesario hacer dicha distinción) y en el que el eje escritura/lectura que articulaba la cultura humanista pierde protagonismo ante la emergencia de nuevos medios de expresión y comunicación. Frente al miedo a que las máquinas terminen sustituyendo a los humanos, el post-humanismo recupera la actitud xenolátrica y se plantea la necesidad de desarrollar un pensamiento ecológico (en su sentido más amplio) que tenga en cuenta no sólo el entorno natural sino también el tecnológico (e incorpore, entre otras cosas, los derechos cívicos de las máquinas).
En este sentido, Peter Sloterdijk advirtió que el término máquina es un concepto enfermo del vocabulario europeo, ya que se originó en un contexto ontológico "muy crudo y unilateral" que distinguía de forma categórica entre las entidades con almas (las personas) y las entidades sin almas (las cosas, entre las que se incluirían las máquinas). Con su necesidad de apoyarse en fundamentos sólidos e inamovibles, la historia de la filosofía occidental ha aceptado esta distinción sin cuestionarla y no se ha preocupado por reflexionar sobre las entidades sin alma. Pero es imposible comprender la complejidad y polivalencia de la experiencia contemporánea a partir de criterios dialécticos que enfrenten como elementos excluyentes al hombre con la máquina o a las almas con las cosas. El vertiginoso desarrollo tecnológico que se ha producido en el último siglo deja al humanismo sin respuestas adecuadas ante la aparición de máquinas (entidades sin almas) cada vez más poderosas y parecidas a los hombres (y no sólo por sus envolturas antropomórficas). "El corsario, ejemplificó Peter Sloterdijk, sabía donde acababa su cuerpo y empezaba el gancho; con las nuevas prótesis esa distinción se complica y con el desarrollo bio-tecnológico dejará de tener sentido".
Frente a la histeria anti-tecnológica que piensa que tenemos que desarrollarnos al margen de las máquinas, el autor de En el mismo barco, ensayo sobre hiperpolítica cree que es necesario relacionarse con ellas y asumir que es imposible vivir en un entorno construido y habitado sólo por humanos. A partir del ejemplo de Andy Warhol que, con una actitud pretendidamente burlona y provocadora, aseguró que había decidido mantener un idilio con su aparato de radio, Sloterdijk abogó en la conclusión de su conferencia por una especie de poligamia entre hombre y tecnología, afirmando que "tenemos que casarnos con las máquinas con las que compartimos nuestras vidas". El post-humanismo concibe al hombre (y no sólo al hombre contemporáneo) como un equipo técnico y y cree que las nuevas herramientas tecnológicas pueden promover un pensamiento en comunidad (no sólo humana). Según Peter Sloterdijk hay que prescindir de una interpretación (humanista) del mundo estructurada sobre la dicotomía sujeto-objeto, porque "los hombres necesitan relacionarse entre ellos pero también con las máquinas, los animales, las plantas..., y deben aprender a tener una relación polivalente con el entorno".
Conferencia:
Aula del Rectorado de la Universidad Internacional de Andalucía.
1 Conferencia “El post-humanismo: sus fuentes teológicas, sus medios técnicos” de Peter Sloterdijk en el Aula del Rectorado de la Universidad Internacional de Andalucía, el 9 de mayo de 2003.
2arteypensamiento es un proyecto de la Universidad Internacional de Andalucía UNIA que tiene como objetivo incorporar la institución universitaria a los debates, la producción, la difusión y la consolidación de las creaciones y reflexiones contemporáneas. Debe entenderse no sólo como una forma de completar la oferta académica de la Universidad Internacional de Andalucía, sino sobre todo como una forma de relacionar la universidad con el entorno cultural y social, de manera que se aumente la incidencia que tiene en el tejido social.
arteypensamiento, se articula en torno al concepto de re/pensar, aplicado al campo del arte en su relación con la cultura y sociedad; y como consecuencia de ello, busca re/formular modelos, formatos, modos de presentación y difusión: talleres, laboratorios, seminarios, conferencias, encuentros, proyectos en la red, publicaciones.
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